FAO: Hay que mejorar los marcos normativos para potenciar a los pequeños productores forestales

Los pueblos indígenas, las comunidades locales y los pequeños propietarios privados poseen o gestionan un porcentaje creciente de los bosques del mundo y pueden desempeñar un papel importante frente a la deforestación y para reducir la pobreza, en especial si se asocian en organizaciones de productores, según afirman dos nuevas publicaciones presentadas hoy por la FAO y un grupo de sus asociados.

En muchas economías rurales, las empresas forestales familiares y comunitarias contribuyen de forma importante a los medios de vida locales. Por desgracia, el papel vital que juegan a menudo es pasado por alto en las políticas gubernamentales.

Una limitación fundamental es su aislamiento entre ellas, respecto a los mercados, la información, los servicios empresariales, los responsables de las políticas, la financiación y las oportunidades de inversión.

Dos documentos de políticas, publicados hoy por el Mecanismo para Bosques y Fincas (FFF, por sus siglas en inglés), una alianza entre la FAO, el Instituto Internacional de Medio Ambiente y Desarrollo (IIMAD) y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), sostienen que un mejor marco normativo, sumado a ayuda específica para que los pequeños productores forestales y agrícolas se asocien en organizaciones de productores forestales, podría cambiar esta situación.

«Asociarse en organizaciones de productores forestales agrícolas puede ayudar a superar su aislamiento, así como otras limitaciones muy reales, como la falta de tenencia segura de los bosques y de instrumentos financieros y de desarrollo empresarial», advirtió el Oficial Forestal de la FAO Jeffrey Campbell. «Tienen que competir –añadió- con empresas a gran escala que a menudo reciben un trato preferente junto con un mejor acceso a los mercados, financiación y recursos».

«Los gobiernos deben proporcionar el estatus y los servicios legales a las organizaciones de pequeños productores forestales y agrícolas que sirvan a sus intereses y ayuden a reducir la pobreza rural», explicó Campbell.

«El apoyo a los productores forestales y agrícolas, incluido dentro del Mecanismo para Bosques y Fincas, es fundamental. Es clave aprovechar el potencial de la silvicultura controlada localmente, reduciendo la pobreza y protegiendo los bosques a la vez», señaló Duncan Macqueen, Investigador Principal del IIMAD.

«Como grupo, los pequeños agricultores y las comunidades y pueblos indígenas productores forestales juegan un papel importante en el comercio mundial, y sin embargo, a menudo se pasan por alto cuando hablamos del papel del sector privado en la gestión y restauración del paisaje forestal», indicó Chris Buss, Director Adjunto del Programa de Bosques y Cambio Climático de la UICN. «Es crucial, por tanto, garantizar que las organizaciones de productores forestales son fortalecidas y empoderadas si vamos a redoblar los esfuerzos a fin de lograr objetivos como el Desafío de Bonn para restaurar 150 millones de hectáreas de tierras degradadas y deforestadas antes de 2020, lo que contribuirá a su vez a la alcanzar los objetivos internacionales sobre clima, biodiversidad y desarrollo», añadió Buss.

Fortalecer a los productores forestales en pequeña escala

El nuevo documento sobre políticas ofrece seis recomendaciones clave para desarrollar organizaciones de productores forestales eficaces, reducir la pobreza y mejorar los medios de vida de las personas dependientes de los bosques:

  • Fomentar el intercambio de conocimientos y aumentar la visibilidad de las organizaciones de productores forestales y agrícolas en la formulación de políticas;
  • Desarrollar incentivos para fortalecer la silvicultura controlada localmente y facilitar la creación de redes entre las organizaciones forestales y agrícolas;
  • Crear marcos legales favorables, proteger los derechos de tenencia de los bosques de los pueblos indígenas y comunidades locales, eliminar las barreras regulatorias, asegurar el acceso a servicios de apoyo, en especial los servicios de extensión;
  • Proporcionar a las organizaciones forestales y agrícolas y sus miembros un mayor acceso a los servicios financieros, como créditos y seguros asequibles;
  • Vincular a los pequeños propietarios forestales a los mercados y servicios, incluida la negociación de precios de mercado justos y ofrecer información de los mercado en tiempo real;
  • Crear una coalición mundial de organizaciones de productores forestales y agrícolas para influir en la formulación de políticas y generar impulso para un mayor apoyo.