El expresidente de la comunidad campesina Túpac Amaru del distrito de Llata (provincia de Huamalíes, Huánuco), Dionisio Sobrado, señaló que en este distrito no hay actividad minera por parte de la empresa Antamina, a la cual, durante su gestión, le vendieron 1,080 hectáreas de sus tierras.
“Acá en Llata no hay actividad minera, solamente hemos vendido terrenos. Tampoco sabemos para qué los habrá comprado Antamina”, dijo a INFOREGIÓN.
Precisó que fueron los comuneros, beneficiados con estas tierras por la Reforma Agraria de los años 70, quienes aprobaron la venta luego de una asamblea general, ya que la actividad ganadera presentaba ciertas complicaciones y el Estado fue ajeno a cualquier proceso de desarrollo.
Además, recibieron una oferta por cierta cantidad de ganado ovino y vacuno por parte de la empresa.
En estos momentos, el plan de las 27 familias que conforman la comunidad campesina es hacer un mejoramiento genético de ganados para poder competir con Cerro de Pasco, Huancayo y Puno, señaló Sobrado.
Cabe señalar que desde hace algún tiempo, la empresa Antamina viene aclarando que no realiza actividad minería en territorio huanuqueño, sino que sus trabajos se centran en el distrito de San Marcos, en la región Áncash.
Antamina también reclama ser propietario de terrenos superficiales en Ancash, que se superponen con una de las concesiones de Río Mosna, ubicada entre estas dos regiones.