La furia de la naturaleza se desató en cinco ciudades del Valle del Río Apurímac y Ene (VRAE). Producto de una torrencial lluvia que cayó entre las ocho y las doce de la noche del miercoles, todas las calles de los distritos de Santa Rosa, Ayna – San Francisco, Sivia, Kimbiri y Pichari fueron inundadas por huaycos formados por ríos de agua que arrastraban a su paso árboles, piedras y lodo y que ingresaron con fuerza a las viviendas.
Hasta el momento, no se conoce de víctimas que lamentar, pero en un rápido recorrido por todos los distritos afectados se apreció grandes daños y cientos de viviendas destrozadas o inundadas con lodo de hasta medio metro de altura.
Prácticamente, todas las viviendas urbanas de los cinco distritos se encuentran inundadas de lodo y varias, unas diez en el primer reporte, fueron arrastradas por la fuerza del huayco.
De inmediato, los alcaldes de los distritos afectados, activaron sus sistemas de defensa civil local, iniciaron acciones de coordinación interinstitucional, declararon en emergencia sus distritos y procedieron a realizar las primeras evaluaciones de los daños.
VRAE incomunicado
La torrencial lluvia, la primera que se presenta en la zona anunciando el inicio de la temporada de invierno, ocasionó el colapso de las líneas telefónicas tanto del sistema fijo como del móvil.
Recién a la una de la madrugada se normalizó la comunicación y desde ese momento se iniciaron los pedidos de ayuda de los alcaldes de los distritos afectados al Gobierno Regional y a la Municipalidad Provincial de La Mar, pedidos que recién fueron respondidos pasadas las diez de la mañana.
Llegó el huayco
En Ayna San Francisco fueron inundadas todas las calles de la ciudad, los huaycos con piedras, palos y lodo bajaban con fuerza desde la entrada de la carretera Ayacucho – San Francisco e inundaban todas las viviendas de la ciudad ante la desesperación de sus habitantes.
En la calle La Mar, la más afectada del distrito, unas cincuenta casas quedaron totalmente destruidas con lodo por encima del medio metro, en tanto que el colegio Diego Thompson, que se encuentra en una pendiente, fue prácticamente inundado por la fuerza de los huaycos.
El local de la Agencia Agraria de San Francisco fue asimismo uno de los más afectados por el huayco que dejó en su interior fango y piedras de casi un metro de altura.
El alcalde Urbano Méndez declaró en estado de emergencia el distrito, activó el sistema de Defensa Civil local, dispuso el retorno de maquinaria desde los distintos puntos de obra para proceder a la remoción del fango y los escombros e inició una inmediata evaluación de daños y damnificados.
«Bajos Mundos» bajo el lodo
Al frente, en el distrito de Kimbiri, el barrio de Huarmamayo, más conocido como los «Bajos Mundos» porque alberga bares y locales de dudosa reputación, y los Asentamientos Humanos Unión y Nueva Esperanza fueron los más afectados. Los primeros reportes hablan de diez casas desplomadas y arrastradas por la fuerza del lodo, mientras que el resto de viviendas fueron inundadas dejando inutilizados los enseres. Se informó asimismo que en varios sectores del camino que conduce a Villa Virgen se ha producido deslizamiento de montículos de tierra de los cerros.
En las primeras horas de la mañana se podía observar gran actividad de comerciantes dueños de los bares de Huarmamayo en las tareas de limpieza para recuperar los pocos muebles que quedaban en pie.
Santa Rosa Incomunicada
Más al sur, la ciudad de Santa Rosa permanecía totalmente incomunicada debido a que las lluvias ocasionaron derrumbes que bloquearon varios tramos de las vías de acceso, tanto en la salida hacia San Francisco como en la que va hacia Palmapampa.
En esta zona, la prioridad es restablecer la comunicación vial, por lo que se dispuso varias brigadas de trabajadores e incluso pobladores que se encuentran sacando la tierra de las carreteras.
También en este distrito los huaycos arrastraron e inutilizaron totalmente una cisterna municipal que abastecía de agua a las comunidades cercanas, según reportó el alcalde local Telésforo Ochoa.
En Pichari se reportaron 25 casas inundadas severamente , mientras en Sivia se informó que prácticamente todas las casas se encuentran llenas de lodo y piedras.
Ayuda
Recién a las diez de la mañana, la región Ayacucho respondió el desesperado pedido de ayuda de los alcaldes del VRAE y dispuso el envío de maquinarias para apoyar en la remoción de escombros y limpieza de las viviendas y calles.
Los alcaldes del VRAE continúan insistiendo para que la Municipalidad Provincial de La Mar, a la que pertenecen, les envíe maquinaria y personal, así como alimentos porque existen personas que lo han perdido todo.
Mientras tanto, los alcaldes de los cinco distritos han instalado una suerte de Comité de Acción Conjunta para canalizar los reportes de los daños, y se han formado comisiones para salir a evaluar los daños tanto en las ciudades como en las comunidades aledañas de donde aún no se tiene ningún reporte.