Ante la evidente falta de apoyo popular, la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios de las Cuencas Cocaleras del Perú (CONPACCP) se vio obligada hoy a confirmar la suspensión de su huelga indefinida y anunciar una tregua de 20 días al Gobierno Central y Regional para que atienda sus demandas.
Así lo anunció hoy en Aguaytía, provincia de Padre Abad, Pedro Pérez Baylón, secretario general de la CONPACCP, quien informó que si al cabo de los días de tregua no se solucionan las demandas del gremio, ensayarán una desobediencia civil como forma de lucha.
En estos días de huelga, los cocaleros no sólo no lograron un diálogo con el Gobierno sino que además se ganaron el rechazo frontal de la población. Despachos de los corresponsales de la zona daban cuenta que durante los días del paro no hubo cierre de comercios, colegios ni instituciones, mientras que el transporte urbano funcionó con normalidad. Las acciones de protesta se limitaron a las salidas de la ciudad, en las vías que llevan a Huánuco y a Pucallpa.
En las carreteras, los cocaleros protagonizaron tres enfrentamientos con efectivos policiales en el puente de Barrio Unido y en la localidad de Huipoca, siendo el más fuerte el registrado el pasado lunes 5 de noviembre y que dejó como saldo policías y cocaleros heridos.
En los días siguientes, las acciones de violencia descendieron de intensidad, hasta que finalmente el jueves en la tarde se dio inicio al pase de los vehículos varados, mientras por la radio, versiones extraoficiales anunciaban el inminente levantamiento de la medida de fuerza.