Margot Quispe Anaya, representante de la Defensoría del Pueblo en Ucayali, reveló que el 99% de las escuelas públicas de caseríos y comunidades nativas de la región carece de personal docente suficiente para garantizar una educación de calidad.
Además de esta preocupante realidad, Quispe Anaya denunció casos de malos maestros que cometen abuso sexual contra sus propias estudiantes menores de edad y puso como ejemplo lo denunciado el año pasado cuando visitó algunas instituciones educativas del lago Imiría, entre ellas la comunidad nativa Caimito.
Quispe Anaya formuló por ello un enérgico llamado a la Dirección Regional de Educación para que, al margen de los procesos administrativos iniciados contra los malos profesores, se les denuncie penalmente.
La funcionaria formuló un llamado a autoridades, funcionarios y servidores involucrados en el tema de protección a la niñez y adolescentes, como la Defensoría de la Mujer, del Niño y del Adolescente (DEMUNA)y el Centro de Emergencia Mujer, para que asuman con responsabilidad su compromiso para evitar la violación de niños y niñas no sólo en centros educativos, sino en el interior del seno familiar.
La representante de la Defensoría mostró asimismo su preocupación por el notorio ausentismo escolar que se registra en zonas rurales de la región y que llega a 650, según se desprende de las visitas de inspección realizadas a las diferentes escuelas públicas y que sirven como un muestreo de una realidad más profunda.