Los cocaleros de la zona de Aguaytía levantaron esta tarde su paralización indefinida, luego de diez días de marchas y movilizaciones aisladas que no lograron obtener el apoyo de la población, ni el diálogo con las autoridades del gobierno, ni la suspensión de la erradicación de los cultivos ilegales de coca, que era su demanda principal.
El puente sobre el río Aguaytía, así como Huacamayo y Huipoca, amaneció despejado luego que efectivos de la DINOES procedieran, la noche anterior, a desalojar a los últimos piquetes de huelguistas, permitiendo el libre tránsito de automóviles y camiones que fueron resguardados por la policía hasta el mediodía, aproximadamente, en que se confirmó el levantamiento de la huelga cocalera con una tregua de 7 días.
Ningún dirigente dio cara para comunicar a los cocaleros el levantamiento de la huelga. En horas de la mañana, en las radios locales, se dio a conocer de la firma de un acta entre los dirigentes y las autoridades locales para el levantamiento de la medida de fuerza, pero nadie pudo tener acceso ni a las propuestas ni a los acuerdos finales.
Pasado el mediodía, las radios confirmaron el levantamiento de la huelga cocalera, que fue cuestionada duramente por toda la población, y de inmediato los transportistas
procedieron a mover sus unidades que permanecían en espera y sin movilizarse por temor a ser agredidos.
Para las primeras horas de la tarde, el tránsito en la carretera Federico Basadre se había normalizado totalmente, incluso en el tramo Aguaytía-San Alejandro, sector poblado por la mayoría de productores de hoja de coca de la región.
En esta oportunidad fue más evidente la falta de apoyo popular a la huelga cocalera, que sólo se sintió en la zona de Aguaytía pues ni en el VRAE, ni en Tocache, ni en Tingo María, ni en otras zonas del Alto Huallaga, se acató esta medida de fuerza que fue ordenada por evidentes intereses políticos de una dirigencia cocalera identificada con el Partido Nacionalista.