En el marco de la Semana Forestal, la directora del Programa de Política y Gestión Ambiental de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental, Isabel Calle, resaltó la necesidad de que la Municipalidad de Coronel Portillo exija a las empresas de aserraderos presentar un estudio de impacto ambiental antes de otorgarles la licencia de funcionamiento.
Esta tarea se extiende a la Dirección de Producción para que promueva la creación de un Plan de Manejo Ambiental, o PAMA, que permita mitigar los impactos ambientales de los aserraderos. «Hay actividades maderables que causan impacto y la municipalidad debe exigirle el PAMA antes de otorgarles la licencia de funcionamiento», dijo Calle.
Entre la mayoría de infracciones ambientales de las mueblerías, se encuentra el polvillo que arrojan al aire. Además, está el mal manejo de residuos maderables y que van a desembocar al río Ucayali. En la actualidad, es un requisito que toda empresa maderable presente un PAMA antes de funcionar. Sin embargo, la mayoría no lo presentan, mucho menos las empresas instaladas desde hace más de diez años.
Por lógica, estas empresas antiguas deberían condicionar sus actividades para revertir el daño ya causado al medio ambiente. «Estas empresas deberían presentar un programa de manejo ambiental y adaptarlo a los impactos que ya han ocasionado», añadió, y precisó que el sector maderero no ha sido prioritario en las actividades del Ministerio de la Producción (PRODUCE). De allí que no se les exija que elaboren un PAMA y que no se controle el impacto ambiental.
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