El Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro se encuentra en una situación alarmante tras el cierre de los grifos por la puesta en marcha del decreto legislativo N° 1126, que señala en uno de sus puntos que todos los establecimientos que comercializan combustible deben de contar con una autorización de la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat).
Los establecimientos de combustible que se encuentran dentro de este régimen están ubicados en Huanta, La Mar y el Vraem; y deben contar con la autorización de la Sunat para poder comercializar su productos en el mercado.
Sin embargo, hasta la fecha solo dos grifos ubicados en el distrito de Pichari (provincia de La Convención, Cusco), autorizados por la Sunat, cumplen con la norma, estos están ubicados en el embarcadero de Puerto Ene y en el Centro Poblado de Omaya Baja,a la altura del kilómetro 1.5 de la carretera a Pichari.
El resto de grifos no tienen el documento que los acredite para comercializar combustibles, gasolina y petróleo a los usuarios, según constató INFOREGIÓN. Una fuente de la Sunat informó que algunos grifos de la zona recibirán su autorización el próximo lunes.
ALZA DE PASAJES
La incomodidad por parte de los usuarios ya se esta sintiendo por que los pasajes urbanos pasaron de costar S/ 1.00 a S/ 2.50; de igual forma los pasajes de Pichari al distrito de Kimbiri en el Vraem pasaron de costar de S/. 7 a S/. 12. Además, se han colocado avisos en las unidades que informan sobre el alza, situación que genera el reclamo de los usuarios.
“¿Qué podemos hacer? Por el cierre de los grifos la empresa ha dispuesto subir los pasajes porque hay que pagar más por el tema de combustible”, dijo un conductor de un minivans que cubre la ruta Pichari-Ayna San Francisco, a INFOREGIÓN.
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