Desde su creación en 2003 la UIF ha detectado operaciones sospechosas que involucran US$ 7.220 millones en diversas actividades económicas.
-¿Qué tan grave es el problema de lavado de activos en el Perú?
Para cualquier país es un problema grave, ya sea de manera real o potencial, porque pone en riesgo la estabilidad del sistema económico y financiero, e incluso la contabilidad del aparato estatal. Todos los países deben enfrentar este flagelo porque han asumido compromisos a través de tratados o convenios internacionales. En el Perú se ha avanzado mucho en los últimos años respecto a legislación, regulación y supervisión, pero aún quedan aspectos en los cuales profundizar.
-¿Hay un cálculo de cuánto dinero se lava?
Hay un cálculo relativo, la estadística histórica de la UIF de los casos reportados desde su creación hasta la actualidad suma US$ 7.220 millones, pero deben existir muchos más que no han sido detectados.
-¿En qué actividad se concentra más este delito?
En diversas actividades, como construcción, comercio exterior, hoteles y restaurantes, no hay una donde exclusivamente se dé el problema. Ello porque en el Perú hay un buen porcentaje de economía informal, pero también penetra en la formal porque no existe una regulación y supervisión completa. Por ejemplo, en Colombia cualquier tipo de actividad económica está bajo el monitoreo de alguna Superintendencia. El Perú tiene un sistema muy libre para ejercer un conjunto de actividades económicas, lo que puede ser beneficioso en algunos aspectos, pero también es perjudicial para el seguimiento de casos de lavado de activos.
-¿El narcotráfico es la fuente principal de dinero para el lavado de activos?
Es la principal, pero no es la única. Perú tiene un problema de narcotráfico que se constituye en el principal delito precedente (fuente de ingresos) para el lavado de activos, pero hay otros delitos relevantes como la trata de personas, la evasión tributaria, la minería ilegal, la extorsión y la corrupción.
-¿Corrupción en el sector público?
Ha habido casos detectados de alcaldes o regidores que tenían depósitos no justificados en sus cuentas, que después han sido vinculados con empresas contratistas.
-¿Qué avances se han logrado en la lucha contra el lavado de activos?
Mire, en 2011 se aprobó un Plan Nacional de Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento de Terrorismo, que contiene un diagnóstico sobre el cual se trazan un conjunto de acciones que el Estado debe llevar a la práctica para luchar con más efectividad contra estos delitos. El Perú y Uruguay son los únicos países de la región que tienen un plan desarrollado. Además desde 2008 se implementó un departamento de supervisión, que se encarga de visitar a empresas que por mandato de la ley están directamente supervisadas por la UIF, como las casas de cambio, inmobiliarias, vendedores de automóviles y joyeros. Desde el año pasado también se incluyen a notarios y cooperativas de ahorro y crédito, pues la SBS aprobó el reglamento respectivo, y ahora se están trabajando los reglamento para los agentes de aduanas y luego se proseguirá para las mineras, las organizaciones sin fines de lucro, entre otros.
-¿Qué obstáculos observa usted para hacer una mejor labor?
No hay que retroceder lo avanzado, pues algunos notarios quieren modificar la ley para que se cambie su rol y ya no sean sujetos obligados a reportar, lo cual sería muy peligroso para el sistema, pues tienen que entender que esto es una obligación internacional. Asimismo, cuando la UIF tiene sospecha de alguna operación y quiere profundizar la investigación no puede acceder a la reserva tributaria ni al secreto bancario del implicado. Al respecto, en el Congreso de la República se está discutiendo un proyecto que faculta a la UIF a acceder a ambos registros y esperamos su pronta aprobación.
-¿Existe un trabajo coordinado con otros sectores del Estado?
Hay una Comisión Ejecutiva Multisectorial, que coordina el trabajo de 15 entidades del Estado, presidida por la Presidencia del Consejo de Ministros, e integrada por la Policía, la Fiscalía, el Poder Judicial, la Sunat, el INEI, entre otras. Es un foro donde se coordina, se discute y se hace seguimiento al plan nacional para la lucha contra el lavado de activos. (Christian Ninahuanca A.)