Mafias del narcotráfico tratan de recomponer a las debilitadas organizaciones cocaleras

El economista y estudioso del tema del narcotráfico, Dennis Pereyra, sostuvo que el gremio cocalero atraviesa por una prolongada fase de debilitamiento debido al aprovechamiento y beneficio personal de sus principales ex dirigentes, algunos de los cuales han llegado al Congreso de la República y al Parlamento Andino, generando desconfianza y resentimiento entre sus miembros.  


 


Pereyra sostuvo que ese debilitamiento se agrava con el cambio experimentado por muchos campesinos que han decidido abandonar los cultivos ilegales de hoja de coca, para incursionar en la economía legal y sembrar productos alternativos como cacao, café y palma aceitera. 


 


Sin embargo, el economista advirtió que las grandes mafias del tráfico de drogas estan tratando de recomponer a las desarticuladas organizaciones cocaleras, pues buscan asegurarse la provisión de la materia prima para la fabricación de droga, la hoja de coca. 


 


De acuerdo con Pereyra, esa recomposición necesariamente implica propiciar un enfrentamiento de los cocaleros con el Estado, ente promotor de los cultivos alternativos y de la erradicación de la hoja de coca ilegal.


 


Agregó que otras actividades inherentes al accionar del narcotráfico son la violencia, el asesinato y las amenazas de muerte que se han incrementado en la zona.


  


Citó como ejemplo lo ocurrido hace unas semanas en la provincia de Padre Abad, donde fue asesinada toda una familia acusada de haber informado al proyecto especial de erradicación de cultivos ilegales de coca, CORAH,  la ubicación de cultivos de hoja de coca. 


 


El especialista animó a los campesinos a incursionar en los cultivos legales y rentables y recordó que “no existe un solo cocalero que haya ganado dinero con la hoja de coca”, sustentado su afirmación en la paupérrima situación social y económica que viven los cocaleros, debido a que el dinero ilícito nunca ha generado desarrollo en las zonas por donde ha sido utilizado.