Tras la advertencia de la embajada de Estados Unidos a sus ciudadanos sobre los posibles secuestros en Cusco y Machu Picchu, diversos sectores han mostrado su desconcierto. Sin embargo, esta advertencia estaría basada en información recibida por la embajada de EE.UU. de que remanentes senderistas se encuentran en zonas cercanas a las rutas turísticas de Choquequirao y Machu Picchu.
Según información que manejan los órganos de inteligencia, columnas de la facción de los Quispe Palomino cruzarían regularmente corredores que conducen hacia centros arqueológicos. El trayecto al que se alude son caminos que se acercan al sitio arqueológico de Choquequirao, desde el cual también se puede acceder a Machu Picchu.
Se sabe que esta ruta es usada como ‘trasteo’ de drogas en mulas, entre otros por la facción de Martín Quispe Palomino, «camarada Gabriel».
La presencia de Sendero data de junio del 2003, cuando un grupo de senderistas capturó a 70 trabajadores, y el más reciente, en el 2012, cuando ingresaron al centro poblado de Kepashiato, distrito de Echarate, en la provincia de La Convención, región Cusco, y secuestraron a 30 trabajadores vinculados al proyecto Camisea.
Durante el operativo de rescate murieron 11 efectivos, entre militares y policías. También cayó en combate un helicóptero UH1H Huey II del gobierno de EEUU.
En este contexto, el gobierno norteamericano habría considerado factible el secuestro de ciudadanos norteamericanos.
Anteriormente, la embajadora estadounidense en el Perú, Rose M. Likins, justificó la medida argumentando que cuentan con “información confiable” sobre el plagio a ciudadanos estadounidenses en esa región.
Se calcula que el 30% de los visitantes extranjeros que llegan a Cusco son de origen estadounidense.
Se debe recordar que previamente en un informe de este diario se señaló que los remanentes senderistas pretenderían iniciar una nueva etapa militar que incluiría el secuestro de extranjeros.
Según fuentes de Inteligencia, principalmente provenientes del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, a inicios de enero se interceptaron diálogos entre dirigentes de la agrupación subversiva que se desplazan desde hace un año por la zona de La Convención (Cusco).
En los análisis a estos diálogos, los subversivos hablaban de un futuro incremento de acciones una vez culminada la época de lluvias hasta finales de febrero.
Se presume, según dichas fuentes, que entre las voces que aparecen en estas conversaciones estaría la de Víctor Quispe Palomino «Camarada José», pero no se ha logrado confirmar. El objetivo de realizar secuestros sería buscar algún tipo de impacto internacional.
Solicitarán rectificación
El alcalde de Machu Picchu, Elvis La Torre, informó que solicitarán formalmente al gobierno de Estados Unidos, mediante su embajada en Lima, la rectificación sobre la advertencia de posibles secuestros en la Ciudad Imperial.
Este pedido será planteado a través de una carta firmada por las autoridades locales y representantes de la sociedad civil, la cual será entregada el próximo lunes. La Torre aseguró que existe seguridad en el distrito para el turismo y en ese sentido la advertencia no tendría sustento (Isabel Carreño G.).