Raciones destinadas a policías del Vraem nunca llegaron a su destino

A fines de setiembre pasado un memorándum fue enviado al despacho del director general de la PNP, Raúl Salazar Salazar, con carácter de urgente. El documento procedía de la Oficina de Control Institucional del Ministerio del Interior.

En él se informaba de una serie de irregularidades detectadas en las adquisiciones especiales para las unidades de la Policía Nacional que operan en el Vrae (Valle de los Ríos Apurímac y Ene) entre enero 2009 y diciembre del 2010. Funcionarios del Ministerio del Interior descubrieron en esos dos años irregularidades que van desde la desaparición de raciones hasta la ausencia de chalecos y balas para los efectivos por licitaciones mal hechas.

RACIONES NO LLEGARON
El informe Nº 005-2012-IN/OCI  fue realizado el 2011, durante el gobierno de Ollanta Humala y cuando el Ministerio del Interior estaba a cargo de Óscar Valdés, y da cuenta de quince irregularidades. Las más graves, según el documento, se refieren a la mala distribución de las raciones frías para los agentes del Frente Policial Vrae.

La licitación 23-2009-DIRECFIN-PNP tuvo como finalidad adquirir 15 mil raciones frías para las unidades de la Policía que operan en el Vrae, pero la Dirección de Logística de la Policía Nacional optó por distribuir 9 mil 843 raciones a otras dependencias, mientras que mil 980 raciones se quedaron en el almacén de la Dinoes.

Las raciones fueron entregadas al Frente Policial Huallaga (3,200), a la Dircote (300), a la Región Madre de Dios (500), a la DIVPOL-Andahuaylas (500), Dirandro (1,000) y dependencias de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales, Dinoes (4,343) de Andahuasi, Cusco, Bagua, Ica, Piura, Puerto Maldonado, Arequipa, entre otros.

Al final, a las unidades para las cuales se efectuó la licitación sólo llegaron 3,177 raciones de comida fría. Según el informe, esta situación se debió a que no se priorizaron las necesidades de las unidades del Vrae frente a pedidos realizados de otras dependencias.

Además, los auditores responsables de la indagación señalan otro hecho relevante: el oficio de julio del 2009 enviado por el entonces jefe de Estado Mayor, general Arturo Dávila Vega, en el que solicitaba la adquisición de 20 mil raciones frías para las unidades que operan en el Vrae por un importe de S/. 600 mil. La mitad tenían que ser con características para la selva y la otra mitad para la sierra; pero extrañamente en los oficios remitidos para solicitar cotizaciones solo se pidió 15 mil unidades, que fueron adquiridas por el mismo valor total que se había dispuesto para las 20 mil. Es decir, mantuvieron el precio a pagar pero redujeron  las raciones solicitadas.

RESPONSABLES
El examen practicado por el órgano de control institucional del Ministerio del Interior comprendió en el proceso a los generales Héctor Chávez Estremadoyro y al general Tomás Chumacero Rodríguez, directores generales de Economía y Finanzas de la Policía Nacional en el 2009 y el 2010, respectivamente.

Aparece también el general Mario Obregón Matos, responsable de la Dirección de Logística (Dirlog), y el coronel Pedro Hoyos, jefe de la División de Abastecimiento de la (Dirlog).

Se comprende además a los tres oficiales que ocuparon la jefatura de la Dinoes en el año 2010, los coroneles PNP Ricardo Sánchez Castillo y Amador Bacalla Guadalupe, y el coronel Clever Vidal Vásquez, este último compañero de promoción del general Raúl Salazar, y ascendido hace una semana al grado de general.

Según los auditores de Interior, estos altos oficiales tienen responsabilidad administrativa por haber dispuesto el desvío de las raciones  para el Vrae para su propia dirección. Además se responsabiliza al mayor PNP Humberto Peña Rosales y al comandante PNP Raúl Vega Cárdenas, así como a los comandantes PNP Antonio Cubas Soto y Segundo Ortiz Argote.

Si bien los autores del informe no establecen ilícitos penales, queda claro que con  la negligencia hallada, la Policía no ganará ninguna guerra y más bien queda a merced de sus enemigos.

ENTREGA TARDÍA DE CHALECOS Y MUNICIONES A POLICÍAS
El informe del Ministerio del Interior también halló faltas en las empresas que ganaron las licitaciones.

La empresa ‘Arsenal 2000 JSCO’ ganó en 2009 una licitación por US$1’232,350 para dotar de municiones a las unidades del Frente Policial Vrae, pero no cumplió con presentar la documentación necesaria para suscribir el contrato.

Para solucionar el desabastecimiento, la División de armamento de la Dirección de Logística de la PNP estuvo obligada a solicitar municiones y armas a varias unidades de la Policía para enviarlas al Vrae y los efectivos no quedaran mermados en su capacidad  operativa.

Un caso similar ocurrió con la empresa ‘Armony Suplly SAC’, que ganó un contrato por doscientos chalecos antibalas nivel IV por el monto total de S/. 700 mil. La empresa entregó los bienes pero fueron observados por incumplimiento de las especificaciones técnicas. ‘Armony Suplly no subsanó las observaciones y se procedió a resolver el contrato.

Entre las conclusiones del informe determina al final que  las direcciones de Economía y Logística de la PNP suscribieron un contrato indebidamente con el consorcio; que fue práctica común otorgar días adicionales para la entrega de bienes, situación ajena a las bases administrativas.

El informe agrega que se otorgó 107 días adicionales para la entrega de raciones frías para el Frente Policial Vrae al consorcio formado por Industrial SISA, Comercial y Servicios Mercum y Logistic Investments aunque las bases fijaron que la entrega debía ser en 30 días.

COPIA BAJO LLAVE
Una copia de este informe fue entregada en setiembre pasado al ministro del Interior,Wilfredo Pedraza, y al director general PNP, Raúl Salazar.

De acuerdo con lo que establece la Ley Orgánica del Sistema Nacional de Control, y tal como lo recomiendan los responsables del documento, el director general PNP debe disponer que Inspectoría PNP tome conocimiento y actúe.

Sin embargo, fuentes consultadas indican que el general Raúl Salazar aún no lo ha cursado a Inspectoría para que se establezcan responsabilidades directas.