A pesar que hace algunos días la empresa estatal PETROPERÚ desmintió que el derramamiento de petróleo en las estación 6 del oleoducto norperuano haya causado prejuicio a la población de la zona, el parlamentario Eduardo Nayap insistió en que los nativos de las comunidades awajún de las cuencas de los ríos Nieva y Marañón sufren «estragos» por el derramamiento del hidrocarburo.
“PETROPERÚ se comprometió a realizar campañas de salud y a repartir bidones de agua pero hasta el momento no ha cumplido con sus promesas, por lo que espero que el poder ejecutivo pueda tomar riendas en este asunto, pues se pone en juego la salud de la población indígena amazonense”, señala el parlamentario.
Nayap también denunció que debido a que los pobladores beben las aguas contaminadas por el petróleo, los pobladores están padeciendo cuadros de sarna, alergias, diarreas, fiebres, entre otros malestares.
Para el congresista es importante la intervención del Ministerio de Salud para que se puedan atender a las poblaciones afectadas, señala un comunicado enviado a INFOREGIÓN.
Cabe recordar que PETROPERÚ indicó la semana pasada que DIGESA les informó que los pobladores de Nueva Esperanza beben agua de un pozo que no está contaminado a pesar del derrame de petróleo de una «pequeña fisura» que se originó por un deslizamiento de tierra el pasado 4 de septiembre.