¿Quiénes y cuántos son los ‘narcoterroristas’ que operan en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y el Mantaro (VRAEM), así como en la selva cusqueña de La Convención?
Un reciente informe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, obtenido por CARETAS, identifica a 130 subversivos y muestra, por primera vez, sus fotografías acompañadas de sus presuntos nombres o alias.
“El presente álbum fotográfico muestra las imágenes de los terroristas que delinquen en la zona del VRAEM y tiene como finalidad servir de instrumento para las entrevistas o interrogatorios con otras fuentes de información y de esa manera poder confirmar, descartar o complementar la información obtenida de las diferentes fuentes (de inteligencia)”, señala el documento secreto.
Los “mandos principales”, según el informe, son 5: Víctor Quispe Palomino, ‘José’; Jorge Quispe Palomino, ‘Raúl’; Carlos Quispe Palomino, ‘Gabriel’; Orlando Borda Casafranca, ‘Alipio’ y una mujer de 42 años: Tarcela Luya Quispe, ‘Valia’, ‘Silvia’ o ‘Rita’. De ella no se sabía nada hasta hoy.
Esta cúpula es la responsable de la planificación de los atentados, y el cobro de cupos a narcotraficantes y madereros, según las FF.AA.
En el documento se identifica también a 55 “combatientes” hombres; 56 “combatientes” mujeres, así también como a una “masa cautiva” conformada por 13 mujeres y 45 niños.
Entre los combatientes aparecen, de acuerdo a información de inteligencia militar, ex licenciados de las FF.AA. que han sido reclutados como francotiradores por los hermanos Quispe Palomino.
BASES EN LA SELVA
Las FF.AA, que han perdido a cerca de 100 militares en múltiples emboscadas desde el 2008, creen que este álbum fotográfico les permitirá cazar a las huestes de los Quispe Palomino. Pero la cosa no es sencilla.
Un primer paso, según el almirante AP José Cueto, actual jefe del Comando Conjunto de las FF.AA., es la edificación de 30 bases militares a lo largo del VRAEM y el Cusco. “Las 10 primeras estarán en La Convención. El objetivo es proteger el eje energético y nuestra gente está ahí todavía durmiendo en carpas”, declaró Cueto a CARETAS.
“No podemos evitar que estas bases se conviertan en blanco senderista. Mientras tengamos una base vamos a tener una posibilidad permanente de ataque. La única forma de evitarlo es que nosotros salgamos de ahí y no vamos a salir”, advirtió Cueto.
El ex ministro de Defensa, general EP (r) Roberto Chiabra, no comparte esa visión. “Esa gente (los terroristas) está ubicada en las partes altas e inaccesibles de la selva. No se trata de construir bases porque se está cometiendo el mismo error de la década del 90. Estamos en otro momento y el factor en juego es el narcotráfico”, opinó Chiabra.
Además, según Chiabra, los ‘narcoterroristas’ solo hostilizan a las bases con el único propósito de obligar a los militares que salgan a patrullar y así matarlos con francotiradores.
“Las FF.AA. deberían contar con fuerzas de intervención rápida e inteligencia que te permita emboscar”, sostuvo Chiabra. “Una tarea obligada es identificar cuáles son los corredores de insumos químicos y de salida de droga y ahí emboscar a los terroristas. ¿Tú le quitas el narcotráfico a los Quispe Palomino y a qué se dedicarían?” (Escribe: Américo Zambrano).
Ver versión en PDF: Terror en el VRAEM
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