Rubén Vargas, analista en temas de narcotráfico, destacó como un éxito policial de la Dirección Contra el Terrorismo, DIRCOTE, las recientes capturas de personas estrechamente ligadas a Sendero Luminoso en el Valle del Monzón, Nuevo Progreso y Aucayacu y que habrían participado en emboscadas y asesinatos selectivos.
Vargas destacó que este esfuerzo policial que contribuye a la pacificación final del Huallaga se da pese a que se habrían desactivado las unidades operativas de inteligencia del Frente Huallaga por falta de recursos, “de modo que cuando la DIRCOTE muestra estos resultados tangibles y objetivos de su actuación en la lucha contra Sendero en el Huallaga, demuestra que son ellos quienes realmente están trabajando en la pacificación del Huallaga”.
En diálogo con INFOREGIÓN, el analista enfatizó que esta unidad policial, que cuenta con poquísimos recursos y casi un nulo apoyo político del sector, fue la que capturó a la cúpula central de Sendero Luminoso y ahora está mostrando exitosos resultados en la lucha contra el terrorismo.
Por ello instó en la necesidad de seguir en la misma línea de trabajo para capturar a las cabezas de la organización, especialmente al terrorista “Artemio” que tanto daño causa en el Huallaga.
En el VRAE no hay resultados
Vargas resaltó que los operativos de inteligencia policial de la DIRCOTE muestran buenos resultados en el Huallaga, como la captura del ideólogo de Sendero, “JL” hace unos meses o de senderistas en Tocache, que contrastan con los resultados que se obtienen en el Valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, donde la lucha contra sendero está encargada al Ejército y en donde los resultados se miden en base a “horas patrulla” solamente.
“El sector Defensa nos dice que los resultados de la lucha contra Sendero son las mil o 1,500 horas de patrullaje de pelotones del Ejército. La verdad que eso es un engaña muchachos, nos están tomando el pelo, no pueden mostrar resultados de las luchas contra esos criminales por las horas patrulladas, son horas estériles de patrullaje”, alertó.
El analista también pidió revisar si realmente se han hecho esas horas de patrullaje, pues el costo por dicha actividad la pagamos todos los peruanos. “Hay que ser más incisivos, más directos en reclamar que en el VRAE se tengan los mismos resultados que se están logrando en el Huallaga”, demandó.
Senderistas se dividen el Huallaga y el VRAE
Por otro lado, descartó que elementos ligados a Sendero vinculados al narcotráfico se estén trasladando al VRAE, pues luego de la negociación del acuerdo de paz entre el gobierno de Alberto Fujimori y la cúpula senderista, ligada por Abimael Guzmán, este grupo subversivo se partió en dos facciones opuestas: los que aún reconocen a Guzmán como líder (acuerdistas y que buscan una solución política a los problemas derivados de la guerra interna) y otra facción radical conocida como Proseguir.
Indicó que precisamente, Proseguir se ubica en el VRAE, y no reconocen a Guzmán como líder, “de modo que es difícil que se pueda dar el traslado de elementos de Sendero del Huallaga hacia el VRAE pues son distribuciones geográficas que se han hecho los terroristas precisamente para no tener enfrentamientos entre ellos y a la vez reconocer su división y diferencia en cuanto a su situación actual”, pese a que son escenarios con iguales características como la presencia del narcotráfico y la coca ilegal.
“Proseguir tiene su propia lógica y razonamiento, continúan con la idea de conquistar el poder a través de la violencia y la sangre, en cambio el grupo en el Huallaga pretende tener una salida negociada a la situación en que se encuentran”, recalcó.
Finalmente, resaltó que en el caso del narcotráfico no existe esta división. Dijo por ejemplo que hay narcotraficantes que estuvieron involucrados en el tráfico de drogas en la década de los ochenta y noventa y que ahora “estarían en la parte sur del VRAE, en Santa Rosa y San Antonio, realizando sus actividades para vender su mercadería hacia Bolivia o los países del Mercado Común del Sur, MERCOSUR”.