Agricultores retomarían medidas de fuerza si gobierno no brinda solución a sus demandas

Una tensa calma se vive en Huamanga ante la posibilidad de nuevas manifestaciones de violencia por causa del vencimiento del plazo otorgado por los agricultores al gobierno, tras la huelga nacional iniciada la semana pasada en diversas zonas del país.


 


Como se sabe, tras las violentas acciones que derivaron en la muerte de cuatro agricultores, los dirigentes agrarios suspendieron la medida de fuerza y señalaron que esperarían hasta el miércoles 27 de febrero, las propuestas del gobierno para la solución de sus demandas. 


 


En ese sentido, pobladores y transportistas de Ayacucho manifestaron su preocupación a INFOREGIÓN debido a que no desean ver interrumpidas sus labores cotidianas ni comerciales.


 


Trascendió en Ayacucho que el Presidente del Consejo de Ministros, Jorge Del Castillo, tendría hoy, en la ciudad de Lima, una reunión con representantes agrarios para buscar una solución a los problemas planteados. Las bases agrarias a nivel nacional permanecerían a la espera de los acuerdos que se puedan lograr con el Poder Ejecutivo. 


 


Los dirigentes agrarios exigen la derogatoria de la Ley de Aguas y del Decreto Supremo 1770, que facultaría al Organismo de Formalización de la Propiedad Informal  COFOPRI, a intervenir tierras dedicadas al agro para dar paso a proyectos comerciales o productivos.


 


Congresista Huancahuari niega vínculos con huelguistas


Mientras tanto, medios de comunicación de Lima dieron cuenta que la congresista nacionalista por Ayacucho, Juana Huancahuari, se encontraría en la zona planificando una nueva revuelta.


 


En respuesta, la parlamentaria sostuvo que su presencia en la zona se debe a otros temas y negó haberse reunido con los dirigentes agrarios. “Como Congresista de la República me he solidarizado con los agricultores y por ello el gobierno tratara de involucrarme”, aseguró.


 


De otro lado, se supo que hoy representantes del Ministerio Público y peritos policiales viajaron a la comunidad de Suso, lugar de nacimiento de los dos campesinos que perdieron la vida durante la huelga agraria, para iniciar las primeras investigaciones y recoger los testimonios de aquellos comuneros que participaron en la trágica jornada.