En los últimos años la figura de Nancy Obregón se ha asociado no solo al Partido Nacionalista sino también aorganizaciones delictivas como Sendero Luminoso y el narcotráfico.
Así, desde hace más de un año, la Cuarta Fiscalía Supraprovincial, a cargo de Marco Guzmán Baca, investiga a la exdirigente cocalera por los supuestos delitos de colaboración con el terrorismo y lavado de dinero producto del narcotráfico y, según fuentes consultadas, el caso estaría terminando en agosto próximo.
Perú21 accedió al testimonio de uno de los 12 colaboradores eficaces, quien, el pasado 16 de abril, fue interrogado por el equipo de la Dirección Antidrogas (Dirandro) al que la Fiscalía le ha encargado investigar el extremo referido a Obregón y su presunta vinculación con el tráfico ilícito de drogas en El Monzón.
LA ‘EX TOMBA’ Y ‘BIGOTE’
Según el testimonio del colaborador, quien dijo vivir en El Monzón desde 1990, Obregón y los dirigentes cocaleros Eduardo Ticerán Salazar, Iburcio Morales (alcalde del Monzón), Rosaura Rosales Ramos (exburgomaestre de esa zona), entre otros, tenían pozas de maceración y chacras donde sembraban la hoja de coca para ser utilizada en la fabricación de cocaína.
“Conocí la poza de maceración de droga en San Juan de Capi de la señora Nancy Obregón Peralta, quien llegó al valle de El Monzón con su esposo Flavio Chávez Peralta, conocido como ‘Bigote’, cuando empezó la erradicación en la zona de Mishollo – Tocache”, empieza a narrar el colaborador eficaz.
A renglón seguido, precisa que entre 1998 y 2001, Obregón “tenía su poza de maceración de droga en el caserío de San Juan de Capi, la misma que era grande donde entraba unas 200 arrobas de hoja de coca. En ese tiempo la señora era conocida como la ‘ex tomba’, ya que creíamos que había pertenecido a la Policía Nacional por el carácter fuerte que tenía”.
La versión de este colaborador coincide con la que han brindado los otros testigos, cuyas identidades también se mantienen en reserva.
Según fuentes fiscales, aunque hace unas semanas se esperaba que la Dirandro emita un informe sobre el caso Obregón, debido a la cantidad de diligencias que aún tiene pendiente el equipo policial, se ha ampliado por 30 días más la investigación.
La primera quincena de julio, con el informe policial en mano, el fiscal Guzmán Baca citará a la exlegisladora para que rinda su declaración sobre las graves imputaciones que se le hacen.
EL CLAN OBREGÓN
El colaborador señaló que Obregón “entró (a El Monzón) por la influencia del Lelis Jara, quien era bastante conocido. Llegó con sus hijos y sus hermanos. Cuando se hizo más conocida y popular por el carácter fuerte que tenía, empezó a traer a más familiares (…) Formaron un clan familiar bastante grande y poderoso, dedicados todos a traficar con las drogas”.
Según la versión, a inicios de 1998 Obregón tenía seis personas a su mando, entre quienes figuraba su sobrino, el químico del ilegal laboratorio. “Al químico le pagaba cien dólares, a los pisadores 70 soles por cada chamba que era de dos a tres días en la poza de maceración”, sostuvo.
El testimonio, que coincide con otros tantos que obran en poder de las autoridades policiales y fiscales, indica también que Obregón compraba entre 360 y 1,000 arrobas de hoja de coca mensuales, “que se procesaban y hacían un promedio mensual de 60 a 100 kilos de pasta básica de cocaína lavada o base”.
CONTACTO COLOMBIANO
La investigación policial–fiscal apunta a que, hasta 2001, Nancy Obregón habría sido una de las principales comercializadoras de droga de un cartel colombiano.
Según las hipótesis, desde marzo o abril de 1999,Obregón habría sido la principal acopiadora de droga y, aunque mantenía su poza de maceración, su principal actividad habría sido la compra de droga ya elaborada.
Sobre este punto, el colaborador dijo que “ella vendía la mercancía a una firma colombiana en grandes cantidades, es decir que ‘reventaba’ en forma semanal entre 30 y 40 kilos de pasta básica de cocaína lavada o base, luego los ‘colochos’ se encargaban de convertirla en clorhidrato de cocaína en Maravilla, a unos 45 minutos de Monzón”.
Según las indagaciones y los testimonios recogidos en los últimos meses, Obregón habría trabajado para esa firma colombiana de narcotráfico por dos años.
La detención de su contacto colombiano, en 2001, habría motivado que la exlegisladora migrara de El Monzóna la zona de Santa Rosa de Mishollo.