El ex viceministro del Interior, Carlos Basombrío estimó hoy que los fenómenos vinculados al narcotráfico en el país están empeorando porque no se ha logrado una reducción de la oferta de drogas, y los niveles de violencia asociados al narcotráfico han crecido tanto en Lima como en otras zonas del país.
En conversación con INFOREGION, Basombrío explicó que en términos generales la política antidrogas que se aplica en el Perú, y que es muy similar desde hace 15 años, no está brindando los resultados esperados en cuanto a la reducción de la oferta de cultivos ilegales, desarrollo alternativo, control de insumos químicos y medidas de interdicción que traten de detener a las organizaciones criminales.
El analista puntualizó que esta situación responde a lo difícil que es el problema, dado que «se está enfrentando a una mafia, a una lógica criminal muy sofisticada y con mucho poder, desde un Estado pobre y con pocos recursos, por lo que naturalmente, tiene que ser difícil el enfrentamiento».
Por ello consideró que no se está ganando la guerra al narcotráfico, “porque no se está reduciendo el problema del flujo de drogas que sale del país hacia el exterior o que se consume en el país, ni tampoco ha disminuido los niveles de violencia vinculados al narcotráfico”.
Pero además explicó que desde el gobierno existe demasiada retórica y poca eficiencia práctica, que se manifiesta por ejemplo en que gran parte de la política antidrogas se basa en el apoyo extranjero mientras el Estado peruano invierte muy poco de sus recursos para la lucha antidrogas.
“Además, es muy difícil enfrentar un problema de drogas, si no se hace un esfuerzo por mejorar a las instituciones que se dedican a ese enfrentamiento, como la policía” agregó.
Erradicación de cultivos
El ex viceministro consideró además que el componente erradicación de cultivos ilegales de la estrategia antidrogas, si bien es un tema controvertido, constituye un método inevitable de control del problema del narcotráfico.
Precisó que no se puede dejar de erradicar “es como la quimioterapia con el cáncer, no la cura pero la controla» y recordó que incluso el presidente boliviano Evo Morales, que es dirigente cocalero, erradica cultivos ilegales de coca en su país.
Programas de Desarrollo Alternativo
En torno a los Programas de Desarrollo Alternativo, Basombrío manifestó su convencimiento de que estos deben darse. «Estoy convencido que tiene que haber programas de desarrollo alternativo, porque parte del problema de la coca es un problema social y el Estado tiene que ofrecer alternativas de desarrollo a la población».
El analista consideró asimismo como una herramienta muy importante la recientemente modificada Ley de Pérdida de Dominio, por la cual el estado incauta los bienes de vinculados al narcotráfico o trata de personas, entre otros delitos mayores.
«Es una herramienta que puede ser muy importante para afectar a las mafias criminales que esconden sus riquezas a través de los distintos medios» puntualizó.