Julián Cabello y Andrés Julca, dirigentes cacaoteros del caserío de Valle de Sión, del distrito de Padre Abad, llegaron hasta Aguaytía para demandar a Devida y a las autoridades del gobierno regional la construcción de una carretera de penetración que les permita transportar sus productos y sacarlos a los mercados.
Con mucha preocupación, explicaron que pasan un vía crucis para sacar sus cosechas hasta los centros de acopio, pues tienen que transportarlos por vía fluvial en un largo viaje de doce horas, que incrementa sus costos y afecta su economía, por la falta de una carretera de acceso.
Cabello Ramos precisó que son unas quinientas familias las que viven en las riberas del río Tarahuacá, quienes, por propia iniciativa, decidieron dejar de cultivar coca y ahora cuentan con cerca de 600 hectáreas de cacao, además de plátano, arroz, maíz, cocona, entre otros productos de panllevar.
Por ello,demandaron a las autoridades regionales y a los funcionarios de Devida, interesarse en su caso y apoyar en la construcción de una vía que les permita acceder a los centros de acopio.
“No sé qué pasa con Devida, prefieren invertir en otras zonas donde no hay cultivos alternativos, y a nosotros que sí estamos por el cambio, nos tienen abandonados y no nos dan una solución destinando recursos para la construcción de la carretera”, refirió Cabello.
Informó que actualmente cuentan con estudios y un expediente técnico elaborado por la municipalidad de Padre Abad, cuyo trazo unirá al centro poblado Valle de Sión con Alto Shiringal, es decir con la carretera Federico Basadre, pero indicó que les falta el presupuesto necesario para su ejecución.