Caretas La operación ‘Aurum 1’ arrancó el viernes 4, durante una reunión en Palacio de Gobierno en la que participaron el presidente Ollanta Humala, los ministros de Defensa, Daniel Mora; Ambiente, Ricardo Giesecke, e Interior, Óscar Valdés, y el jefe del Comando Conjunto, general EP Luis Howell.
Humala dio instrucciones para que la operación no altere el orden interno y firmó el Decreto de Urgencia 007-2011, que ordena no solo la destrucción de dragas sino también de ‘balsas’, ‘carrancheras’, ‘chupadoras’, ‘tracas’ y otras embarcaciones utilizadas para la extracción ilegal de oro en Madre de Dios.
Con el alba, a las 6 y 30 am del sábado 5, 1,500 efectivos de las Fuerzas Armadas y la Policía se desplazaron en lanchas rápidas y helicópteros a las cuencas de los ríos Madre de Dios, Inambari, Tambopata y Malinowski, donde operan unos 10,000 mineros informales. La destrucción de las dragas y otras maquinarias en un área de 30 hectáreas estuvo a cargo de la Marina de Guerra.
Al cierre de esta edición, se habían destruido 130 embarcaciones ilegales, según el capitán de navío Fernando Valeriano, subdirector de Intereses Marítimos y de Información de la Marina. Valeriano dice que la clave para el éxito de la operación fue la “sorpresa”. Ni siquiera las autoridades del gobierno regional de Madre de Dios estuvieron al tanto de lo que ocurriría.
En marzo pasado, el gobierno de Alan García destruyó en una semana 35 dragas en Madre de Dios, pero el operativo militar abortó tras las violentas protestas que dejaron 2 muertos en Puerto Maldonado (CARETAS 2170).
Esta vez, las FF.AA. tomaron establecimientos públicos y privados para evitar desmanes, pero de todos modos hubo pampa. El lunes 7, mineros informales del sector La Pampa bloquearon un tramo de la vía Interoceánica. Otros tomaron la carretera que une Puerto Maldonado y Cusco, entre los km 107 y 110, y levantaron barricadas con llantas y maderos humeantes.
El Ministerio del Interior movilizó 980 policías para dispersar a los manifestantes con gases lacrimógenos y perdigones, pero la cosa empeoró. El martes 8, los ilegales incendiaron unos 30 locales comerciales. Hay 2 heridos.
Inteligencia de la Policía asegura que 10,000 mineros informales de las provincias del Manu, Tambopata y Tahuamanu se movilizan a Puerto Maldonado para desatar el caos, pero el gobierno dice que no retrocederá.
Una fuente militar asegura que ‘Aurum 1’ continuará hasta el 5 de diciembre próximo. La meta es destruir 500 embarcaciones ilegales, entre ‘calancheras’ (las más pequeñas), ‘castillos’ (las medianas) y dragas (las más grandes).
En Madre de Dios, la única región del país donde se practica la minería aluvial aurífera, ya se han devastado alrededor de 20,000 hectáreas de selva virgen. Y la construcción de la Carretera Interoaceánica ha acrecentado la instalación de campamentos mineros y fomentado la migración interna, sobre todo desde Puno. Se calcula que en estos nuevos pueblos-campamentos habitan alrededor de 40,000 personas, un tercio de las cuales se han volcado a la minería aurífera ilegal. El resto instala bares clandestinos o prostíbulos.
La Marina ha enfocado sus acciones en la Reserva Nacional Tambopata-Candamo, donde abundan las ‘dragas’ y ‘chupadoras’. Allí, precisamente, operaba el congresista ‘comeoro’ Amado Romero (Gana Perú).
Romero presidió durante los últimos 7 años la Federación Minera de Madre de Dios y admitió que posee 4 concesiones mineras en Tambopata. En setiembre presentó 2 proyectos de ley para que se autorice el uso de las dragas. Fue separado de la Comisión de Energía y Minas y suspendido de Gana Perú. Pero ahora que está en marcha este megaoperativo militar, el gobierno haría bien en ubicar las dragas ilegales del congresista ‘comeoro’ y destruirlas.