El turismo ornitológico sería otro atractivo de Perú y podría aprovechar las 69 millones de personas en Estados Unidos que practican el aviturismo, actividad que generaría empleo en las zonas donde abundan estas especies, estimó la Sociedad de Hoteles del Perú (SHP).
El presidente de la SHP, José Koechlin, señaló que la observación de aves constituye una de las principales actividades turísticas practicadas por los estadounidenses, lo que implica un mercado sumamente atractivo que puede llegar a Perú.
Manifestó que estos visitantes generan un impacto positivo para la creación de empleo rural y mejor calidad de vida en las comunidades, pero para ello será necesario insistir más en la protección de las zonas naturales en las que habitan las aves.
Recordó que Perú cuenta con 84 de los 104 pisos ecológicos del mundo, lo que posibilita la presencia de aves en un gran número.
Según la Comisión de Promoción de Perú para la Exportación y el Turismo (Promperú), Perú es uno de los países con más variedad de aves a nivel mundial y uno de los más ricos en biodiversidad.
Prueba de ello son los dos récords mundiales que ha obtenido: 331 especies de aves registradas en un solo día en el Parque Nacional del Manu y 569 especies en una sola locación: la reserva nacional de Tambopata.
El denominado “aviturismo” se realiza en el Manu (Madre de Dios), el santuario de Machu Picchu (Cusco), Aguada Blanca (Arequipa), en donde es posible ver flamencos; y en el circuito Chiclayo–Iquitos, en el nororiente peruano.
En el país se ofrecen tours de uno hasta 17 días en diferentes zonas del país como el Manu y los Pantanos de Villa. El primero es uno de los destinos preferidos, donde el costo puede bordear los 3,000 dólares por un tour de 15 días.
Un turista observador de aves cuenta con equipos como telescopios, cámaras fotográficas con lentes de gran alcance y binoculares.