Los mineros de Madre de Dios, agrupados en el Frente de Defensa de Mineros Artesanales de La Pampa, reclamaron Derecho de Preferencia en las concesiones así como ampliar el corredor minero para operar en esa región ya devastada por las actividades extractivas.
Aseguraron asimismo que son víctimas de una “campaña de desinformación” en su contra por parte de medios que vienen denunciando diversos hechos ligados a delitos ambientales e impactos sociales generados por la extracción ilegal de oro en ese departamento.
Sin referirse en ningún momento a la grave contaminación ambiental que producen sus actividades extractivas, los mineros reclamaron mas bien una Ley de Derecho de Preferencia para los mineros sin concesiones; la ampliación del corredor minero; y que se excluya la intervención de las Fuerzas Armadas en sus actividades.
Reserva deforestada y contaminada
Reconocieron que realizan actividades mineras en la Zona de Amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambopata pero aseguraron que sí pagan tributos y precisaron que sus exportaciones de oro son fiscalizadas por Aduanas y Sunat. De la defensa de la integridad de la reserva natural ni una palabra.
Según da cuenta el portal Actualidad Ambiental de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA). el Frente de Defensa dijo que está en contra de la derogatoria del decreto de urgencia 012-2010 (que prohíbe el uso de dragas en los ríos de la Amazonía), pero no por evitar la depredación de la zona sino porque exigen antes una Ley de Derecho de Preferencia para los mineros sin concesiones.
Los mineros exigen asimismo que se amplíe el corredor minero y que se excluya la intervención de las Fuerzas Armadas en sus actividades.
Respuesta a Comisión Ambiental
El pronunciamiento es una respuesta a la Comisión Ambiental Regional (CAR) de Madre de Dios, que a mediados de setiembre solicitó al Ministerio del Ambiente (Minam) que se declare en emergencia la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambotapa (sector La Pampa), debido a los daños que vienen causando los mineros informales.
La CAR indicó que este pedido se ampara en el primer artículo de la Ley de Emergencia Ambiental 28804, según la cual “se considera emergencia ambiental la situación, no solo inesperada, sino también por la gravedad de sus efectos o impactos en la salud y la vida de las personas o en su entorno ambiental, que requiera la acción inmediata sectorial a nivel local, regional o nacional”.
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