Tras un año de gestión, el joven dirigente cocalero, Alan Valdivia Beteta, informó que al finalizar su mandato, el próximo 10 de agosto, dejará definitivamente la actividad dirigencial en su gremio para retornar sus estudos en la Universidad Nacional Agraria de la Selva, UNAS.
Antes de anunciar su retiro, Valdivia Beteta reiteró sus discrepancias con su homólogo del valle del Monzón, Eduardo Ticerán Salazar, y lo criticó duramente por ser un elemento ligado al gobierno y haber abandonado las banderas de lucha del gremio cocalero.
Tras lo dicho, Valdivia, considerado del ala más radical dentro del gremio cocalero, dijo que no volverá a referirse a Ticerán Salazar y que será la propia población la que sacará sus propias conclusiones.
Valdivia Beteta señaló que no perseguía ningún objetivo político, tal como se había rumoreado en las últimas semanas.
«Doy gracias a los campesinos que me confiaron el cargo, mi periodo ya termina el 10 de agosto y yo daré un paso al costado para que sean otros dirigentes los que asuman la dirección de nuestra asociación. No he pensado en la reelección y hay un acta firmada en ese sentido. Voy a dedicarme a mis asuntos personales retornando a las aulas universitarias», declaró.
Finalmente, sostuvo que el 15 del presente mes se reunirá con los integrantes de asuntos legales del gobierno regional de Huánuco, para planificar el empadronamiento de los cocaleros en la provincia.