Brasil respalda una cumbre presidencial antidrogas, propuesta por el Perú, porque ayudará a fortalecer la cooperación regional en la lucha contra el narcotráfico, sostuvo hoy el embajador brasileño en Lima, Carlos Alfredo Lazary.
Dijo que la cumbre significaría una medida política “muy poderosa” para impulsar la coordinación en esa lucha en todos sus niveles, tanto dentro como fuera de Sudamérica.
Lazary Texeira refirió que en la cumbre se podría establecer “patrones comunes” en las operaciones policiales, la vigilancia de las fronteras, la supervisión que debe haber en la Amazonía y el compartimiento de información de Inteligencia.
También, anotó, se podría establecer criterios comunes para la planificación de operativos comunes contra las bandas de narcotraficantes.
“Estamos conformes con la propuesta del presidente (Ollanta) Humala, queremos colaborar y cooperar, crear patrones de operación conjunta para el combate al narcotráfico”, afirmó.
Perú propuso una cumbre antidrogas con la participación de los países productores y consumidores, como Estados Unidos, México,Colombia, Brasil y Bolivia, adelantó esta semana el canciller Rafael Roncagliolo.
El embajador Lazary Texeira manifestó que Brasil es parte de la ruta del narcotráfico, por lo que el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, está muy interesado en afianzar la cooperación antidroga con los países vecinos.
Perú es uno de los países de la región andina con mayor área de cultivo de hoja de coca, principal insumo para la elaboración de cocaína, que aumentó durante el gobierno pasado, según organismos internacionales.
Según Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), de mantenerse esta tendencia Perú podría convertirse en el primer productor de cocaína, cuyos principales mercados son Estados Unidos y Europa.
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