La República. El presidente Ollanta Humala reclamó un cambio radical de la estrategia de la lucha contra Sendero Luminoso y el narcotráfico en el valle de los ríos Apurímac y Ene (Vrae), y desafió a los altos mandos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional a alcanzar resultados tangibles contra las fuerzas subversivas de Víctor Quispe Palomino, “camarada José”, de cuya organización ningún alto dirigente ha resultado detenido o muerto en los últimos cinco años de combates.
“La seguridad empieza por los resultados. El país se sentirá seguro si sus Fuerzas Armadas logran vencer el enemigo. Pero vemos que, por el contrario, ese enemigo sigue en el mismo lugar de siempre, golpeándonos cada vez que quieren.
Eso debe terminar”, dijo Humala cuando brindaba con las máximas autoridades del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, el Ejército, la Marina, la Fuerza Aérea y la Policía Nacional. Unos tenían una copa de pisco sour en la mano, otros una de algarrobina. Se celebraba en Palacio de Gobierno el reconocimiento de los institutos armados y castrenses al nuevo jefe supremo.
En su alocución al asumir el mando, el pasado 28 de julio, Humala ni siquiera mencionó al Vrae. Solo se refirió en términos generales a la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico.
Pero esta vez, el miércoles 3 de agosto, de una intervención espontánea de 40 minutos, más de la mitad la dedicó a la situación del conflicto en el Vrae, según confirmaron a La República fuentes castrenses que participaron en la reunión privada en la Casa de Pizarro.
“El terrorismo y el narcotráfico son flagelos que azotan al país, amenazan la tranquilidad y el bienestar de miles de peruanos, y cada cierto tiempo se convierten en protagonistas de violentos episodios. Señores, necesitamos rápidos resultados mediante la fijación de metas, plazos y objetivos. Esto debe terminar ya”, explicó Humala a los presentes, entre quienes se encontraban no solo los comandantes generales de los institutos castrenses sino también los jefes de Estado Mayor y los directores de inteligencia, entre otros.
“He instruido al ministro de Defensa para que se provea al Comando del Vrae todos los medios que sean necesarios para de una vez por todas acabemos con el terrorismo que se ha enquistado en una de las zonas más pobres del país. Pero los medios serán proporcionados en función de los resultados. No se trata de dar por dar”, destacó Humala en un discurso que sorprendió a todos por su energía.
“Haremos cambios profundos con el propósito de conquistar nuestro principal objetivo, y si en el camino debemos sacrificar en aras de la eficiencia, lo haremos”, apuntó, en alusión a la pronta renovación del alto mando de la Región Militar del Vrae (RMV).
El comandante general de la RMV es el general de división EP Víctor Montes Barrios, el segundo comandante general es el general de brigada EP Felipe Aguilar Vizcarra, la jefatura de Estado Mayor la ocupa el general de brigada Marco Jaymez Rebossio y la Inspectoría de la RMV está a cargo del coronel EP Miguel García Salas.
“No voy a aceptar más bajas sin que nadie se haga responsable por ellas. No puede ser que cada vez que maten a un soldado enviado al sacrificio, todo sigue igual, nadie diga nada. Eso se terminó. Habrá responsabilidades”, destacó Humala.
El jefe del Estado también estaba enterado de episodios de actos de corrupción cometidos por efectivos desplegados en el Vrae. En febrero de este año la policía antidrogas descubrió que en un grifo de Pichanaki vendían combustible de helicóptero que había sido robado por efectivos del cuartel de Satipo.
Humala además ha recibido reportes de que el presupuesto destinado a la inteligencia se malgasta en otros fines que contribuyen a la guerra contra el terrorismo.
“No vamos a permitir ninguna forma de corrupción. Todos los casos serán sancionados ejemplarmente. Cada centavo que se destina debe ser usado con eficiencia”, expresó Humala con severidad.
El Comando Conjunto concibe y conduce la guerra en el Vrae, pero los planes los ejecuta la RMV.
Al final el mandatario reiteró su deseo de contar con planes precisos, logros específicos y avances concretos.
“Si van a tener todo el apoyo, lo mínimo son los resultados tangibles”, advirtió Humala.
Los comentarios están cerrados.