Agentes del Departamento Contra el Terrorismo de Huánuco y de la Dirección Contra el Terrorismo de Tingo María capturaron a tres peligrosos extorsionadores que exigían cupos a los comerciantes de la zona.
Disfrazados de vendedores ambulantes, los efectivos lograron detener a los sujetos que se hacían pasar por terroristas para exigir dinero a sus víctimas, especialmente comerciantes de Huánuco.
Avelino Montoya Silva, propietario de una ferretería en Huánuco, denunció haber recibido constantes llamadas telefónicas de un sujeto que decía ser el camarada “Larry”, integrante de la organización terrorista Sendero Luminoso.
«Impuestos de guerra»
Según relató, «Larry» indicaba que por encargo del camarada “Artemio”, debía pagar “impuestos de guerra” a través de cupos.
La información fue confirmada con una carta intimidatoria recibida por el empresario, en la cual los delincuentes le exigían 50 mil dólares, monto inicial que luego de varias tratativas se redujo finalmente a 30 mil nuevos soles, a ser entregados en el parque Ramón Castilla, en Tingo María.
Los agentes fueron enviados para ejecutar la operación Tornado III bajo la modalidad encubierta. Así, disfrazados de vendedores ambulantes se apostaron cerca del lugar donde se había acordado la entrega del dinero.
Con la participación del Ministerio Público se efectuaron los primeros actos para identificar a los delincuentes y detenerlos. Fotocopiaron los billetes que serían entregados y se fabricaron otros de papel periódico para incrementar el fajo.
El comerciante encargó a otra persona la entrega del dinero y cuando llegó al lugar un sujeto delgado lo interceptó, recibiendo el paquete. Los agentes hicieron un pequeño seguimiento y comprobaron que otras dos personas siguieron al primero.
Tras una rápida acción se logró capturar a los tres, quienes fueron identificados como Carlos Antonio Flores Bravo (31), César Fernando Cáceres Toval (35) y Yonel Ayra Santamaría (23).
Los tres tienen requisitorias por delitos de robo y hurto agravado en varias localidades del Perú. Por disposición del Ministerio Público fueron trasladados a Huánuco.
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