Entregan restos de 35 pobladores asesinados en años de la violencia política en Santo Tomás de Pata

Luego de haber sido plenamente identificados por forenses del distrito judicial de Ayacucho, los restos de 35 habitantes de Santo Tomás de Pata asesinados por Sendero Luminoso y efectivos del Ejército entre 1983 y 1991, en el marco de la época de violencia política, fueron entregados a sus familiares por las autoridades del lugar en medio de sentidas escenas de dolor.



 


El distrito de Santo Tomás de Pata, ubicado en la provincia de Angaraes, se encuentra a tres horas de Huamanga, pero pertenece al departamento de Huancavelica, lugar donde la violencia política ocasionó graves estragos en la población, la misma que se vio obligada a huir a zonas cercanas para sobrevivir.


 


También se encontraron cuerpos en el antiguo colegio secundario del Julcamarca, el mismo que fue convertido en una base militar por el Ejército, institución que también cometió graves violaciones contra los derechos humanos.


 


«Todo era matanza y violencia en mi pueblo, tanto militares y terroristas cometieron muchos abusos. Quemaron locales y por ello muchos de nosotros aún no tenemos partidas de nacimiento. Los militares se apoderaban de nuestro ganado, venían en helicópteros y sacaban a nuestros familiares de sus casas y nunca más los regresaron», señaló Elizabeth Ramos Pariona, hija de Manuel Ramos Huarcaya, asesinado en Santo Tomás de Pata.


 


Por su parte, Edgar Zambrano Paredes dijo lo siguiente: «Hubo muchas matanzas y no solamente en Santo Tomás de Pata, sino también en anexos aledaños. En 1991, decenas de personas, entre adultos, mujeres y niños, fueron salvajemente asesinadas por terroristas cuando los militares abandonaron la zona en venganza. Después de muchos años de dolor, hoy podré velar y darle cristiana sepultura a los restos de mi padre. Pedimos apoyo psicológico y una reparación al Estado».


 


Los restos de los 35 pobladores fueron trasladados en hombros hasta la Basílica Catedral de Ayacucho, donde recibieron una misa en su memoria.