El Grupo de Operaciones Antidrogas de Tingo María destruyó cuatro laboratorios clandestinos de pasta básica de cocaína y uno de clorhidrato de cocaína en el valle del Monzón.
Según las primeras investigaciones, estos laboratorios ubicados en los poblados de Cachicoto y Matapalo pertenecían a los traficantes conocidos como “JJ”, “Chancho”, “Zurdo”, “Huayanay” y “Picuro”.
La policía incineró, además, seis toneladas de hojas de coca y tres de insumos químicos. Al momento de su destrucción, los laboratorios estaban en pleno proceso de extracción del alcaloide de coca.