70% de las concesiones forestales en Madre de Dios son bosques certificados

El último jueves, se realizó en Puerto Maldonado una reunión de trabajo para el diseño del proyecto “Plan de Inversión del Programa de Inversión Forestal” que permitirá a nuestro país acceder a un fondo de US$ 50 millones para contribuir con la meta de emisión neta de cero de gases por el efecto invernadero procedentes del cambio de uso del suelo y del bosque.

En la cita se encontraban presentes los representantes del Ministerio del Ambiente (Minam), Ministerio de Agricultura (Minag), el Ministerios de Economía y Finanzas (MEF), el Consejo Interregional Amazónico, el Gobierno Regional de Madre de Dios, Federación Nativa, Federación Agraria, castañeros y concesionarios de bosques; además de integrantes del BID, organismos de cooperación, entidades financieras y ONG.

Alan Schipper Gerovich, gerente de Forestal Río Piedras S.A.C., participó en el taller en representación de los concesionarios de bosques de producción permanente de Madre de Dios.

“Para este año llegan al 70%  las concesiones forestales con bosques certificados”, dijo indicando que este es un trabajo que se viene impulsando desde el sector privado en Madre de Dios.

“Sin embargo este sector no tiene acceso a la energía eléctrica, por ese motivo no es posible la segunda trasformación de la madera. Solo se aprovecha el 30%  de la madera en primera trasformación, esto sucede porque no se tiene energía de interconectada, faltan carreteras y se encuentra lejos de los mercados que permitirían el mejor aprovechamiento de la madera y su rendimiento económico”, informó el especialista a INFOREGIÓN.

Añadió que el gobierno peruano no está interesado en apoyar este sector pues no invierte en la construcción carreteras, “pese a que los concesionarios de bosques pagamos un derecho de aprovechamiento y que los bosques son de propiedad del Estado”.

“Se ha descentralizado la gestión forestal pero ésta se ha burocratizado. Existe una mala gestión institucional debido a la inestabilidad política local, lo que trae como consecuencia el cambio de directores e ingenieros, lo que genera la revisión de los planes generales de manejo, planes operativos anuales, etc.  situaciones que pueden demorar hasta cinco o seis meses para ser aprobados. Mientras esto sucede, no se pueden operar en el bosque lo que hace perder oportunidades de mercado”, afirmó.

Dijo también que el acceso a la tecnología es casi nula, se sigue aserrando con sierras cintas o discos de corte, tecnología de hace cien años, cuando el mundo moderno de la madera, es el corte con láser.

Schipper Gerovich recordó a los asistentes que el mercado aún no valora la madera de bosques certificados.

“Si ponemos en el mercado maderas de bosques certificados junto a maderas de bosques legales, con sus debidos precios, el mercado preferirá a la madera de menor precio, es decir a la madera de bosques legales pero sin certificación. Todavía somos ambientalistas de corazón, pero no de bolsillo”, concluyó.

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