La lucha contra la desnutrición en el Perú puede llegar a dar un salto cualitativo si las autoridades toman en cuenta las propuestas que se hacen desde el Instituto de Nutrición, Educación y Desarrollo (INED) respecto a la utilización de la cáscara de uno de los productos emblemáticos del Perú: el cacao.
En esa perspectiva, la directora ejecutiva del INED, Mercedes Mendoza viene impulsando la utilización de esta cáscara como un excelente insumo que reemplaza a las galletas o el pan en la preparación de tradicionales platos peruanos como la ocopa arequipeña, el ají de gallina, la papa a la huancaína, entre otros.
Actualmente, el Perú produce unas 46 mil toneladas de granos de cacao y desperdicia unas 120 mil toneladas de cáscara, las que se pueden usar en la lucha contra la desnutrición no como un único alimento sino como un alimento complementario. Pero no solo eso: el inmenso volumen desperdiciado puede llegar a generar problemas ambientales porque nadie le da un manejo adecuado.
En el Perú producimos unas 46 mil toneladas de granos y estamos desperdiciando 140 mil toneladas de cáscara. En el mundo estamos desperdiciando casi doce millones de toneladas de cascara. Costa de marfil es el primer país productor del mundo, ellos producen aprox 1,400 mil tns de grano y botan cuatro millones de tns de cáscara, convirtiéndose incluso en un problema logístico y ambiental deshacerse de esa cantidad de cáscara. Estamos aportenaod un nuevo uso en la salud,
Mendoza Albarracín manifestó que el interés del INED está centrado en difundir las propiedades nutricionales de la cáscara así como de la versatilidad para adaptarse a platos típicos peruanos sin añadirle ni quitarle su tradicional sabor. “La cáscara del cacao es de sabor neutro, y esa es una ventaja”, explicó.
La reconocida investigadora es creadora de innovadores platos y postres en base a esta cáscara. Así, plasmó recientemente en un libro originales recetas de gnocchis de cacao, maduros arrebozados en cacao, causita de yuca con cacao rellena con cecina y salsa de cocona, ají de pollo con cacao y mani, pizzacao hawaiana, leche asada de cacao y mermeladas entre otros.
En entrevista conjunta concedida a INFOREGIÓN con la presidenta del INED, María Méndez, Mendoza la reconocida investigadora explicó que la cáscara del cacao en realidad sirve como un espesante. “En el caso de la huancaína reemplaza a las galletas y en el caso del aji de pollo reemplaza al pan”, indicó.
Por su parte, Méndez manifestó que si se toma en cuenta que la cáscara desperdiciada tiene un valor de 50 céntimos el kilo, la utilización de las 120 mil toneladas puede insertar en la economía de los cacaoteros unos 60 millones de soles.
Los comentarios están cerrados.